house of cards

bueno bueno el insomnio todavía está de visitia en mi cabeza. y mientras una esta en el paro que no parada, me dejo caer en el influjo de los movimientos del viento. en las caidas de sol doradas y resplandecientes del horizonte. ahora ando leyendo toda la obra de Amelie Nothomb, estoy enganchadisima a esta literatura, es una acción bulimica que transforma la ingesta en vomito fractal sobre mi inquieta masa grisecea. ahora tengo más tiempo para lanzarme a mi obsesión voraz de leerlo todo, lo bueno, lo malo, lo dantesto, lo terrible, lo burlesco, y lo anodino.

No se puede que suene ñoño o pueril, o chachiescenita, me da igual. solo se que Niñapajaro me ha dado muchas más cosas de la que hubiera imaginado. empezo de manera casual, en una etapa en la que no tenia trabajo, en la que necesitaba sentirme dentro y no siempre fuera en un lugar out.

mi blog es una vía de comunicación con la nada, que lo es todo, son los birdyvisitantes de pajarolandia. de mis sílbidos aprendí a orir sus ecos, la voz del otro. si el otro no existiera tampoco yo sería. somos el tiempo, somos lo que hacemos, lo que dejamos, pero sobre todo lo que decimos. en algunos momentos de tensión o de nervios podemos decir cosas que no sentimos, pero que sin embargo nos abrigan ante la decepción, nos protegen de actitudes dañinas por parte de otros unas veces conscientes otras inconscientes. nadie es perfecto. empeze con silbidos dedicados , que luego tendieron a desaparecer con el tiempo. que volvieron de vez en cuando, pero ya no tendrian la fuerza de aquella extraña pasión, si pasión. un no pudo ser, había intentado jugar mis cartas, lo que no sabía es que los demas jugadores se apuntaron un farol, agradeciendo al tramposo que me dejase escapar con mi as de corazones a otra timba más gloriosa... ...

aprendí , porque lo que no te mata te hace más fuerte. tuve la audacia inocente inaudita de fijarme en el menos apropiado, si a veces nos fijamos nos adherimos a lo malo irremediablemente, una caida libre cuyo batacazo es que se rian de una. asi que me sentí idiota perdida , sola muy sola en una noche de invierno en un lavapies vacio. alli paradita, desencajada, aturdida porque mis odios no daban credito a tanta cosa rara. yo solo queria tener una historia y me lleve una hostia parda, me sentia como en una pelicula francesa donde no pasa nada pero el tiempo sigo corriendo. y subi la ave maria como pude hasta alncanzar y ver un taxi. estaba tan aturdida que el taxista al llegar a casa, salio del coche y abrazo un océano de lagrimas. ...... ........